la otra cara/pasión país

Con parque o sin parque para los caminantes?

Inés Muñoz Aguirre

Gracias al pago del estacionamiento todos los que caminan a diario en el Parque del Este, han logrado recuperarlo poco a poco.

También debemos dar gracias al gerente que en algún momento asumió en Inparques el reto de su rescate, porque no podemos ignorar que el magnífico parque diseñado por el paisajista y arquitecto brasileño Roberto Burle Marx y sus asociados Fernando Tábora y John Stoddart con la participación del botánico venezolano Leandro Aristeguieta, llegó a exhibir el aspecto de una ruina, con caminerías destruidas, árboles enfermos, embarcación abandonada, papeleras rotas, etc. 

Si no fuera por el abuso de haber convertido el parque en un llenadero de cisternas (lo cual la pone en evidencia como una gran obra en la cual se previó que contará con agua suficiente para mantenerse en épocas de sequía, no para abastecer la ciudad), la contaminación que producen los numerosos carros y motos que transitan por las caminarías, las horrorosas papeleras plásticas, el galpón que interrumpió el paisajismo que unía el parque con la pasarela y el espacio del Museo del transporte y los equipos de sonido que algunos instructores deportivos ponen a todo volumen, debemos reconocer que ha habido ciertos avances.  

En los últimos tiempos se realizó la restauración de la vieja Carabela de Colón convertida en Leander, la recuperación de algunos tramos de caminarías, la pintada de los brocales ( aunque no debe hacerse así porque originalmente eran de obra limpia),  la renovación de la iluminación y el mantenimiento de las áreas verdes.

Un triunfo de todos porque es de suponer que nuestros recursos están siendo empleados en lo que se deben emplear.  Y es que el cambio comenzó a observarse cuando se inició el cobro del estacionamiento en dólares. Sin embargo, vale la pena recordar que el pago de los impuestos que hace todo trabajador y toda empresa, tanto los municipales como los nacionales, se hacen para que sean invertidos en el bienestar de los contribuyentes (hablamos de educación,  salud, recreación y mantenimiento de vías y mobiliario urbano) , es por ello que los parques emblemáticos de todas las grandes ciudades, como el Central Park de Nueva York o El Retiro de Madrid son totalmente gratuitos, porque es un derecho de todos los contribuyentes.

A los que excusen el pago que se realiza, argumentando que lo que se paga en el Parque del Este, se paga por estacionamiento, los invito a voltear la mirada,  por ejemplo, al Parque Omar en Panamá donde no solo es gratuito el estacionamiento, sino que cuenta con un sistema de vigilancia continua de gente preparada que recorre el parque en bicicleta,  atención de primeros auxilios, bebederos de agua  y una serie de ventajas que garantizan el entretenimiento de sus usuarios.

Hay una máxima fundamental para la gerencia eficiente de cualquier Estado: un ciudadano saludable, física y mentalmente, es un ciudadano productivo que paga impuestos. Así se produce el círculo virtuoso que saca adelante un país.

Esta semana la tarifa del estacionamiento del Parque del Este subió a $ 2,50. Para alguien que camina a diario (5 días a la semana) representa $ 50 dólares al mes. Eso ocurre en un país en el que los sueldos de los jubilados (Un gran porcentaje de ellos y de muchos trabajadores que acuden al parque)  no llega a los 100 dólares. Y no olvidemos que para usar el carro como transporte para llegar al lugar hay que ponerle gasolina.

Saque usted sus conclusiones. 

2 comentarios en “la otra cara/pasión país

  1. Excelente y necesarias reflexiones en tiempos aciagos como los que vivimos, espero tener la dicha y el honor de participar en su taller. Gracias

  2. Inés, me encantaron tus cortos relatos. Son amenos y tocan temas importantes que deben contribuir a formar buenos ciudadanos. Muchas gracias por enviarlos, ya que me apena confesar que no los conocía. De ahora en adelante estaré pendiente. Abrazos

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